CUÁNDO NOS CAMBIA LA VIDA?

Cuándo decidimos que es la hora de salir de la panza de mamá, o cuando aprendemos a decir papá, puede ser el día que entramos a la escuela, o cuando escribimos nuestras primeras letras... nos cambia la vida en un instante, cuando cae nuestro primer diente y hay que sonreír; quizás, también, el día en que conocemos a aquella persona que nos hace sentir cosas maravillosa y no sabemos porque; cuando se va el amor, cuando conocemos el dolor, cuando logramos nuestros sueños, o cuando no pudimos hacerlo, en cada derrota y en cada triunfo. Nos cambia la vida en cada segundo; pasa, con fuerza, con lágrimas, con risas y muchas canas.
Nos cambia la vida sin sentirlo, sin notarlo, reflejada en un espejo; es como una historia, como un cuento. Nos cambia la vida desde adentro, en silencio. Y me pregunto ¿Cuando cambio mi vida? ¿Te lo has preguntado?....

Soñar

Nunca imagine que te tendría, que podría sentir aquellos sueños, sentirme dueño de tus pensamientos

poder leer tus ojos y ver cuanto sentimientos hay en ellos, mirada clara y pura, que revelan los mas bellos secretos, donde el amor es un misterio eterno .

Verte aquí es como morir y vivir, morir en tu ausencia y vivir en tu presencia

Más que todo esto

Para caminar, existen los caminos
Para vivir, las madres
Para morir, el amor
y para volver a vivir, la ilusión

Ese camino que me lleva a ti
Esa madre que me dice que sea feliz
Ese amor que mis lágrimas hace brotar
y la ilusión de volver a amar

Camino, que es incierto
Madre que no veo
Amor que ha muerto
ilusión que no encuentro

Para caminar, existen los caminos
Para vivir, las madres
Para morir, el amor
y para volver a vivir, la ilusión,

De espalda

Sin mirarnos, solo sabiendo que estamos ahí
recordando el día en que nos conocimos, dejando pasar el tiempo, así, como pasa el viento entre nosotros, sin tocarnos, pero haciéndose sentir.
De espaldas, solo sintiendo tu presencia y mi ausencia. Con el pensamiento perdido en aquellos bellos momentos que algún día vivimos.
De espalda a la felicidad vivida, a la dicha compartida, abriéndonos paso a la distancia, y al recuerdo que quedara después de este momento.
No hay nada que decir, solo empezar a andar, sintiendo como nos alejamos, sin mirar atrás.