Queriendo describir los sentimientos en un papel, sin mentir, solo dejar que los pensamientos fluyan sin temor, que cada palabra escrita exprese el momento que se vive. Poder entregar mucho con la esperanza puesta en que algún día podrás recibir de regreso mucho más de lo que realmente esperabas o quizás sentir la decepción de nada recibir. Porque la pretensión del hombre es conseguir lo que nunca ha dado, por lo que nunca ha hecho nada. Nada que no pueda entregar, ni tampoco recibir... quien diría que la vida se convertiría en un control de quien da y quien recibe. Qué tanto podemos descubrir en ese juego absurdo de poder de entrega? Nadie ha superado el control de quien da y la derrota de quien recibe.